De nada me arrepentiré si lo hago convencido, porque el placer de vivir está en lo que uno elige.
Una vez me perdi, y otras debo admitirlo, no me deje encontrar...
De tan borracha alguna
noche creo
que la olvide...
Esperando sin remedio un dulce sueño que no va a llegar.
solo se que todo puede terminar de una manera, en un rincón hecho pedazos mi amargo final.